Artículo de opinión de José Quilez, presidente de la Sociedad Española de Contracepción
Estas efemérides surgen de la necesidad de centrar la atención en un aspecto concreto, normalmente olvidado o poco considerado, aunque sea durante un lapso de breve tiempo. Gracias a ellos se consigue aumentar la visibilidad de ese tema concreto que precisan de cierta concienciación, probablemente porque, al no hacerse visible, se está convirtiendo en un problema.
Pues en mi caso, y a pesar de celebrar cada año el día mundial de la contracepción, sigue pareciéndome inconcebibleque sea necesario celebrarlo para poder hablar de anticoncepción.
Hace años participé en un proyecto que trababa de acercar los distintos métodos anticonceptivos a la población, sobre todo a la gente joven. A grupos de chicos y chicas con toda unavida por delante. Los vemos y pensamos que nos aventajan en años a los que vamos peinando canas. Que disponen de información instantánea, completa, rápida… que saben mucho más que nosotros a su edad…Este proyecto nos acercaba a un gimnasio, en el que personas jóvenes hacían deporte. Llevábamos una caja grande (llamativa, por cierto, se veía bien…) llena de distintos métodos, para que la gente pudiese verlos, tocarlos y hablar con nosotros o aprovechar para resolver pequeñas dudas. Resulta increíble comprobar el desconocimiento general sobre los métodos y la cantidad de mitos que afloran alrededor del uso de los distintos tipos. Es realmente inconcebible constatar que, personas jóvenes, (pero no adolescentes) no hayan tenido la oportunidad de despejar sus dudas, conocer los métodos y en definitiva poder vivir con libertad y sin miedo ese derecho fundamental que poseen, como es la salud sexual y reproductiva.
¿En qué fallamos? ¿No es ya muy accesible la información? ¿No es tan fácil como clicar con el ratón en una web o navegar con nuestro smartphone en redes sociales? Quizá concedemos demasiado crédito a internet…
"Resulta increíble comprobar el desconocimiento general sobre los métodos y la cantidad de mitos que afloran alrededor del uso de los distintos tipos"
No obstante, seamos serios. No toda la responsabilidad de este asunto debe recaer sobre los usuarios. En incontables ocasiones somos los propios profesionales los que tenemos muchas objeciones sobre el uso de un método concreto, no nos atrevemos a recomendarlos por una creencia propia no justificada por la evidencia científica, o si los comentamos podemos condicionar la opinión de la usuaria por nuestra propia idea. Todo ello salpicado de una absoluta heterogeneidad en la atención a la salud sexual, tan cambiante, a veces poco accesible y siempre bajo amenaza, sea en España o en cualquier otro lugar.
Así que, aunque tras años de labor me parezca inconcebible seguir necesitando un día mundial de la anticoncepción, según escribo estas líneas frente a la pantalla de mi ordenador me voy dando cuenta un año más de lo necesario que es contar con esta fecha.
Espero que esta reflexión sirva para que este día mundial no sea necesario en un futuro, ojalá próximo. Deseo que este debate sobre métodos, mitos, ITS y otros aspectos de la salud sexual y reproductiva traspase las fronteras de este día y se extienda con naturalidad por todos los demás días del calendario. Significará muy probablemente que la educación sobre este aspecto ha mejorado tanto, que podremos utilizar nuestra fecha para otras cuestiones relevantes.
Hasta que eso ocurra, seguiremos a un paso. Acércate a vernos cualquier día, seguro que no te arrepentirás.
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Entrevista publicada en el portal Consalud.es el 26 de septiembre del 2023 patrocinada por Gedeon Richter
